Este es el telstar. El primer balón de fútbol con paños de forma de hexágono (blanco) y pentágono (negro) usado en 1970 (México). La distribución de sus colores -solo dos- facilitaba que los televidentes pudieran verlo sin dificultad.
Fue hasta 1978, en el mundial de Argentina, cuando los pentagonos negros perdieron el luto. Con el Tango de Adidas, fueron los paños hexagonales los que ganaron un travieso triángulo de lados curvos. Con esto, pequeñas esferas blancas aparecieron de pronto en el conjunto del balón.
Cuando los mexicanos organizaron el mundial (1986), consideraron que el diseño del Tango bien podría ganar pequeños detalles, quizá no tan nacionales -dada su fama- pero sí bastante Aztecas.
Misma lógica para el Etrusco Unico, el balón de Italia 90. El león de tres cabezas asomaba decorando -junto a pequeñas "olas"- aquel diseño ahora seco del legendario Tango.
El Questra (Estados Unidos, 1994) cambió el motivo de los italianos por otro un poquito más universal: estrellitas y satélies. Bueno, seguramente Hugo Chávez dirá que pusieron planetas porque para los norteamericanos ser nacionalista y ser dueños del mundo es lo mismo, pero este no es un blog de política.
Quizá fue en Francia (1998) cuando las innovaciones en diseño se vuelven interesantes: Aparece el color. Tricolore fue el nombre del balón y pequeños gallitos -ícono francés- asomaban con su cresta roja y su cuerpo blanco sobre el azul tranquilo del polígono.
Y si el color fue bienvenido, ¿por qué no la forma? Fevernova (Corea Japón 2002) fue un verdadero cambio, no sólo en tecnología sino en diseño. Se abandonó el esquema iniciado en 1978 por el tango y se vio un balón bastante diferente, que representaba al fuego y la energía con su nueva figura.
Arigato doña línea recta y señor polígono, pero hasta aquí nomás. Teamgeist es el balón de Alemania 2006; y aunque todavía no me he detenido a verlo de cerca, aparenta romper con el panal de 32 paños de la Telstar de los 70. Si, ya sé mamá, que igual tiene forma redonda, que es como cualquier pelota pero; si quieres que te diga un secreto, te garantizo que muchos hombres del planeta cambiarán en sus sueños las redondeces de Shakira por las curvas de este balón.
Ya te veremos, gordita.
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